28.2.14

LITURGIA Y FECHAS IMPORTANTES


MARZO DE 2014

OCTAVA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO
Cuarta semana del salterio
  2 VIII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

TIEMPO DE CUARESMA
Cuarta semana del salterio
Comienza a utilizarse el volumen II de la Liturgia de las Horas.
  5 MIÉRCOLES DE CENIZA, (morado).
Ayuno y abstinencia

PRIMERA SEMANA DE CUARESMA
Primera semana del salterio
  9 I DOMINGO DE CUARESMA
15 SABADO. CSsR Muere San Clemente Hofbauer en 1820. FIESTA

SEGUNDA SEMANA DE CUARESMA
Segunda semana del salterio
16 II DOMINGO DE CUARESMA
19 MIERCOLES. SAN JOSÉ, ESPOSO DE LA VIRGEN MARÍA, Solemnidad (blanco).

TERCERA SEMANA DE CUARESMA
Tercera semana del salterio
23 III DOMINGO DE CUARESMA
25 MARTES. LA ANUNCIACIÓN DEL SEÑOR, Solemnidad (blanco).

CUARTA SEMANA DE CUARESMA
Cuarta semana del salterio
30 IV DOMINGO DE CUARESMA (morado o rosa).


“AMANDO Y AYUDANDO
A LOS POBRES
AMAMOS Y SERVIMOS
A CRISTO”
 
PAPA FRANCISCO


Cuéntanos Gerardo





Cuéntanos Gerardo:
”Custodiar a todo el Pueblo de Dios”
“Servicio humilde, concreto, rico de fe, de san José”

En este hermoso mes de marzo, final del invierno e inicio de la primavera; comenzamos el tiempo de pereparación para la PASCUA, el próximo día 5, miércoles de ceniza. Como Iglesia, celebramos al inicio de la cuaresma, dos grandes solemnidades: San José, esposo de la virgen maría y, la Anunciación del Señor.
A San José, el Señor le ha encomendado custodiar a la Iglesia Universal, así pues, debemos con gran confianza invocarlo en el ejercicio de esta maravillosa y delicada misión. Al respecto, el papa Francisco hace la siguiente reflexión:
“Nunca olvidemos que el verdadero poder, el  es el servicio, y que también el Papa, para ejercer el poder, debe entrar cada vez más en ese servicio que tiene su culmen luminoso en la cruz; debe poner sus ojos en el servicio humilde, concreto, rico de fe, de san José y, como él, abrir los brazos para custodiar a todo el Pueblo de Dios y acoger con afecto y ternura a toda la humanidad, especialmente a los más pobres, los más débiles, los más pequeños; eso que Mateo describe en el juicio final sobre la caridad: al hambriento, al sediento, al forastero, al desnudo, al enfermo, al encarcelado (cf. Mt 25,31-46). Sólo el que sirve con amor sabe custodiar. (PAPA FRANCISCO, Plaza de San Pedro, martes 19 de marzo de 2013. Solemnidad de San José)
El 25 de marzo, celebramos la Anunciación del Señor, el misterio salvador de la Encarnación del Hijo de Dios que meditamos en el primer misterio gozoso de nuestro rosario y cada vez que rezamos con devoción, fe y esperanza el ANGELUS.
Los misioneros redentoristas y muchos colaboradores de la familia alfonsiana recordamos el día 15 a San Clemente María Hofbauer. Dijo en Viena: "Hay que comenzar de nuevo a predicar el Evangelio".




LA MISA NO SE ESCUCHA, SE PARTICIPA




LA MISA NO SE ‘ESCUCHA’, SE PARTICIPA
PAPA FRANCISCO
 (En Santa Marta 2014-02-10)

"El Señor desciende como una nube sobre el Templo, viene colmado por la gloria de Dios. Esto ocurre en la celebración litúrgica. La celebración litúrgica no es un acto social, no es una reunión de los creyentes sólo para rezar juntos. En la liturgia, “Dios está presente”, su presencia es real. En la Misa, “la presencia del Señor es real, justamente real”
“Cuando nosotros celebramos la Misa, celebramos justamente la Última Cena. Vivimos de nuevo la Pasión y la muerte redentora del Señor. Es una teofanía: el Señor se hace presente sobre el altar para ser ofrecido al Padre para la salvación del mundo. La Misa no se ‘escucha’, se participa, y se participa en esta teofanía, en este misterio de la presencia del Señor entre nosotros”.
"La Misa, “es una conmemoración real, o sea es una teofanía: Dios se acerca y está con nosotros, y nosotros participamos del misterio de la Redención”. Lamentablemente, tantas veces en la Misa, contestamos el celular, miramos el reloj, “contamos los minutos”: “no es precisamente la actitud que nos pide la liturgia: la liturgia es tiempo de Dios y espacio de Dios, y nosotros debemos entrar allí, en el tiempo de Dios, en el espacio de Dios y no usar el celular ni mirar el reloj”:
“La liturgia es precisamente entrar en el misterio de Dios, dejarse llevar al misterio y estar en el misterio. Nosotros nos reunimos aquí para entrar en el misterio: esta es la liturgia. Es el tiempo de Dios, es el espacio de Dios, es la nube de Dios que nos envuelve a todos”.
“Hoy nos hará bien pedir al Señor que dé a todos nosotros este ‘sentido de lo sagrado’, este sentido que nos hace entender que una cosa es rezar en casa, rezar en la iglesia, rezar el Rosario, rezar tantas oraciones hermosas, hacer el Vía Crucis, muchas cosas bellas, leer la Biblia … y otra cosa es la celebración eucarística. En la celebración entramos en el misterio de Dios, en aquel camino que nosotros no podemos controlar: solamente Él es el Único, Él la gloria, Él es el poder, Él es todo. Pidamos esta gracia: que el Señor nos enseñe a entrar en el misterio de Dios”.
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