30.4.13

Cuéntanos Gerardo




Mes pletórico de fiestas

De fondo es el mes que María llena de alegría; mes mariano de las flores, de las aves, de los cantos; de los regalos a nuestra Madre del cielo y a nuestra madre del hogar.

Y hablando de regalos… ¿De qué tamaño serán nuestros regalos? Siempre serán pequeñísimos al lado del gran regalo de la vida que Dios nos da a través de nuestra madre, envuelto de fe, de esperanza, de cariño, de ternura, de gozo y alegría; muchas veces de dolor y de llanto.

Siempre serán mínimos al lado de la Vida que María, nuestra madre del cielo nos trae en su Hijo Jesús, nuestro Redentor: la Vida Eterna. ¡Que grandes regalos! Verdaderamente inmerecidos, totalmente gratuitos. Con la Vida de Jesús Niño, Maestro, Redentor, Rey y Hermano, somos los seres más felices de la tierra.

¡Gracias Dios Padre! Que nos llenas de una infinidad de regalos. ¡Tú mismo te haces regalo!

Si nuestros ínfimos regalos, no son parte de nuestra vida, nuestra vida misma en las manos y en el corazón de Dios, no tienen ningún valor, así podía ser todo el oro del mundo o un galaxia de estrellas. Es Dios por su Hijo Jesús quien llena de valor nuestra vida y nuestras obras, nuesrtros pensamientos y nuestras palabras.

Celebremos, pues, con alegría y felicidad a nuestras madres, gran regalo de Dios. Celebremos con gran dicha todas las fiestas de este mes: a María, la Madre de Dios. A Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, Cuerpo y Sangre, Pan de Vida eterna, Sangre de salvación. Al Espíritu que nos ha enviado, Guía y Maestro, Protector y Consolador, Fuego y Amor. A la Santísima Trinidad, Origen de todo lo visible y lo invisible; Origen de todo amor, fiesta y bienaventuranza. Seamos Felices.

Felicidades a todas las mamás

Y a las mamás que sufren,
el consuelo y la ternura de Cristo Redentor
y el Perpetuo Socorro de María.


No hay comentarios.: