Cuéntanos Gerardo
Con cuánta alegría en el cielo y en la tierra hemos celebrado los congregados del Santísimo Redentor junto con miles y miles de hermanos y hermanas en la fe y en la devoción y confianza, la solemnidad de NUESTRA SEÑORA DEL PERPETUO SOCORRO. Fortalecidos y con gran gozo, nos preparamos ahora para la solemne celebración del Santísimo Redentor el tercer domingo de este mes de julio.
María, corredentora nos guía y nos anima para esta gran celebración y en el seguimiento de cada día. Según el comentario del P. Francisco Pérez Colunga “María se siente íntimamente asociada a la suerte de todos los hombres,” (Novena del Santísimo Redentor).
Acompañados de María, descubrámonos redimidos por el supremo, delicado, tierno … … … e infinito amor de Dios en el Santísimo Redentor.
Celebremos desde nuestra propia redención, pero, también desde nuestra propia tarea (Acción de gracias, alegría, profesión, anuncio, solidaridad, enfermedades, aflicciones, apostolado, etc) de cada día con inmenso gozo la fiesta del Santísimo Redentor de toda la familia humana, en el cielo y en la tierra.
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